miércoles, 6 de febrero de 2008

Enamorada Incongruencia

Bueno, aca va una especie de declaración, escrita por mi un dia muy tarde en la noche, y muerta de sueño. Asi que aqui va una somnolienta declaracion a quien sabe que es para él. Dejo advertido desde ya que no se cuanto tiempo dure esto publicado porque en algún momento me dará mucho pudor tenerlo expuesto...


Sii, adios al miedo, me he atrevido a amar. Me he atrevido a amarte, a entregarte lo que llevo dentro, a mostrarte el como sea que soy. Me he liberado solo para decirte sin tapujos que te amo. Nada fácil, pese a lo fuerte del impulso. Muchas son las cosas que se le resisten al atreverse, pero sobre todo son las miles de inseguridades. Ahí están, ahí siguen latentes esas inseguridades, pero ocultas, casi arrinconadas. Siguen, pero ya no les hago mayor caso, aunque prefiero guardarlas para los posibles tiempos de sequía y hambruna de amor y soledad.
Me he atrevido y he aprendido a disfrutar de lo que siento, estoy aprendiendo a vivir el momento con toda su intensidad. Y es que amarte me produce esa felicidad instantánea y casi abrumante, pero nunca hastiante. Produce esa sensación tan adictiva de no querer separarme nunca de tí. No se hasta cuando se extienda el nunca, no quisiera ver hasta donde llega eso, porque el ahora para mi es el siempre, el ahora es la eternidad para mí. Y si el siempre, el ahora, el por siempre se acaba, sabre que en algun momento estuvo ese siempre que en ese momento disfrute tanto, y que disfrute tanto porque fue contigo, porque fue de todo corazón, porque lo sentí, y casi superaba mi capacidad de contencion sin ser algo molesto, sino más bien una sensación plena.
Sii, es incongruente, por supuesto que lo es!!, mucho, es incongruente con mi amargada declaración de independencia, pero que le voy a hacer, soy humana, así somos los humanos...muchas veces bastante incongruentes, defecto contra el que es bastante difícil luchar. Y es que el amor es una droga, es una droga porque te hace olvidar la amargura, también porque te ciega y te hace sacrificar muchas cosas, pero si se sabe vivir es una hermosa y sanadora experiencia.
Sí, te amo, aunque sea lo más meloso del mundo, asi es, es la pura verdad. Estás en mí, atado a mi piel, y tu imagen está siempre en mi mente. Te quiero y añoro a cada minuto, no te poseo ni quiero, solo te deseo, pero con una inconmesurable ternura. Estar en tus brazos es para mí un regalo del cielo, verte una hora también lo es, y más aún la felicidad que siento cuando estoy contigo. Y no te vayas a ningun lado que yo no me voy, dejemos que el presente sea un mucho tiempo, dejemos que vaya a pasear al infinito.

lunes, 7 de enero de 2008

Mi amargada declaracion de independencia

Primero quiero decir que sí creo en el amor y sí creo que las cosas buenas pasan. Creo que son cosas que efectivamente pueden ocurrir, creo haber conocido a algunos suertudos que han hecho que su vida funcione.

Por mi parte, sí creo que esas cosas se puedan dar de tanto en tanto, existe esa mínima posibilidad de que encuentre a alguien algun día que me haga feliz, que se yo, claro que dudo de haberlo conocido ya.

Acá va mi prerrogativa. Quiero, he querido y he amado, tal vez han sentido lo mismo por mi alguna vez. En este preciso momento mentiría si dijera que no existe alguien a quien quiero de una forma relativamente profunda. Pero, aun así, no pongo las manos al fuego por nadie, ni creo plenamente en nadie, aunque no me volveré paranoica buscando mentiras.

Por lo tanto aquí declaro mi independencia. Mi independencia del amor. Me declaro autosuficiente en forma parcial de él. Puedo querer, pero no creo en los compromisos, no creo en la fidelidad, ni en el amor eterno. No, esas cosas no son para mí, no las considero ni consideraré en mi vida. No dejaré que un hombre ocupe los dominios de mi ser ni de mi corazón en forma indefinida.

Creo que sí se puede conocer a alguien y pasar momentos gratos juntos, pero por mi parte creo que eso siempre tiene un tiempo de caducidad. Creo que se pueden disfrutar los momentos, pero mas alla de eso, no lo se. No hay conquista eterna, no creo en el amor invencible, creo en el que se va construyendo sobre la marcha, pero tampoco lo consideraré para mí.

Declaro mi independencia de las relaciones, puedo querer, pero renuncio nuevamente a la entrega completa. Sí, son miedos e inseguridades, cualquiera puede opinar como guste, para mi es así no importan ya las causas pues la forma de mi ser se ha vuelto irremediable en eso y ya está marcado mi camino de independencia y máximo deseo de autosuficiencia. No existen las familias ni los respaldos, esta vida es una marcha que solo sigo por mi cuenta aprovechando el recurso que se presente sin mayor apego hacia él.